ALL RIGHT, MY FRIEND...

-El Nevasa y las colegialas inglesas- Carta de presentación - En el puerto de Cádiz -

Report mandado por el Nevasa, donde se dice que, sale del puerto de Lisboa para hacer escala en el puerto de Ceuta.

El Nevasa atracado en los muelles de Poniente.

     

Las colegialas inglesas asomadas en las regalas de la cubiertas. Mas arriba el cartel del Nevasa.

Sentados en el pretil de la fuente: Pepe Parodi, Castillo, Blasco, ¿? y un grupo de adolescentes británicas...

     

En la Plaza de los Reyes, el grupo de colegialas con Castillo, Blasco y Pepe, ¿?

Junto al Café Colón, otro grupo de muchachas.

     

Calle Real arriba, Pepe Parodi y Castillo, sonríen al lado de sus "conquistas"... Sólo serán unas horas, sin embargo en este efímero tiempo, podía tejerse la ilusión de una pequeña aventura, de un beso...

Pepe Parodi, era el único que sabía algo de ingles, y nuestro oráculo para saber cuando arribaban los transatlánticos... Por lo tanto, su amistad, era algo más que necesaria para obtener plaza en estos deseados encuentros culturales, preceden- tes de las actuales becas Herasmus...

     

Y las breves horas de estos encuentros llegan al final... Desde las cubiertas del Nevasa, las muchachas nos despiden. Tristeza...

El Nevasa va soltando las amarras, allá en las últimas enfilaciones del dique de Poniente... Melancolía

 

 

     

 

     A modo de resumen diré: Que durante algunos años, los buques  Navasa y  el  Uganda -verdaderas escuelas en el mar-, hacían escala en Ceuta, y desde sus cubiertas altas siempre nos saludaban, como en un sueño, las niñas-adolescentes de los colegios ingleses....

 

Las calles, los jardines, las plazas de Ceuta se llenaban con sus risas, y la alegría se desbordaba, aquí y allá sin que nadie deseara que transcurrieran las horas...

Tras el último adiós, el puerto, Ceuta, el mar, la tarde... se sentían abandonados como en la triste canción desesperada de Neruda. Sí, era verdad, cuando el Nevasa arrumbaba la bocana, en nosotros, se sentía la ausencia de las cosas...

 

Pepe Parodi Pérez
Todas las fotografías de esta página han  sido cedidas  generosamente por él,  tras  más de  40  años guardadas.
Ahora, como una luz nueva, nos dan su testimonio...
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                                                                               En Cádiz, a 5 de marzo de 2010

 

     Me había llamado Pepe Parodi, para saludarme y decirme que había entrado en nuestra Web, Hacía muchos años que no sabía de él, y la verdad, aquella llamada me llenó  de alegría, y también  me llenó, sobre todo, de viejos recuerdos que de pronto, se agolparon en mi memoria pretendiendo salir todos en tropel…
    Y hablamos de muchas cosas, y Pepe se vino a Cádiz un día de carnaval, y continuamos hablando de aquellos años, cuando aún éramos jóvenes, apenas unos muchachos…Y como una cosa natural, yo le propuse que escribiera en ·”Ceuta en el  corazón”, y contara algunas de las pequeñas historias  de su barrio, de su música, de las aguas turquesas del “claro” en el Chorrillo, de los años pasados en nuestro Instituto -entonces solamente existía uno-, de las clases magistrales de don Manuel, de los  trasatlánticos Nevasa y  Uganda “abarrotaítos” de colegialas inglesas, y de tantas y tantas  cosas que sólo él podría contarnos.
    “El gozo en un pozo”, a pesar de mi empeño y de mis reiteradas invitaciones a que se incorporara a nuestra Web, Pepe hacía  oídos sordos y no se dejaba convencer. Ya tenía perdidas las esperanzas de su incorporación, cuando hace unos días recibí  unas fotos en que podemos ver a Pepe en diferentes plazas de Ceuta, acompañado de aquellas colegialas inglesas que arribaban todos los años a nuestro puerto, y que nosotros esperábamos, como esperaba el pueblo de Israel que le llegara del cielo  el anhelado maná. Y he aquí, que la oportunidad que había estado esperando, me llegó cuando menos lo esperaba; así, que rápidamente, me puse manos a la  obra, y construimos un apartado para Pepe dentro de la Web, donde se expusiesen  algunas fotografías suyas que aquí y allá había ido recogiendo. .
    “Audacia es el juego”, y aquí estamos, en estos instantes, transmitiendo a mi amigo Pepe, mi atrevimiento –ojalá  no se lo tome a mal-,  de exponer sus fotografías en una página Web. Quizás no me lo tenga en cuenta, porque él, al margen  de ser profesor y titulado en Economía, también es marino y ha recorrido los siete mares… Y todos sabemos que los marinos, acostumbrados a la furia de los vientos, son  algo pendencieros, románticos,  intrépidos, y sobre todo llevan el gusto de la aventura en el alma, de tal manera, que espero que nuestro apreciado amigo eche -aturdido por la inconciencia-, en falta: el riesgo, el azar, la hazaña, el peligro, la brisa salobre del mar … Y al albur de su ser de marino, se apreste a enrolarse como nuevo tripulante de este bajel llamado, Ceuta en el corazón
     Y en definitiva, arrojadme a los tiburones si llevado de mi imprudencia, y  en una leva obligada,  he tratado de subir a bordo, contra su voluntad,  a nuestro entrañable amigo. Sin embargo, no ha sido de mala fe, ni buscar un provecho propio;  sino la alta estima  que le tenemos, y la consideración  de que su enrole en nuestro buque  puede  traernos para todos, sin lugar a dudas,  hermosos recuerdos de aquella Ceuta  de los años sesenta, que de otro modo quedarían en el olvido para siempre… ¡Perdóneme, el encartado, aunque sé que no tengo perdón. Sí, es verdad,  no tengo perdón…!  

 

       Nos vemos, un abrazo. All rigth, my friend…

 

                                                                                     Manuel Castillo Sempere

 

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Al principio de los años setenta, un grupo de muchachos de Ceuta, decidimos asomarnos al mundo, y nos fuimos a estudiar Náutica a la ciudad de Cádiz, "tacita de plata", o como dijera Josemaría Pemán, Salada claridad...

 

Y entro esos muchachos, en el puerto de Cádiz, Pepe Parodi y Miguel Osorio -Piloto y Jefe de Maquinas de la Marina Mercante-; junto a ellos, Lino- Perito Naval-y su novía, y como mascota, aquel perrito que hacia nuestra delicias y al que llamamos, graciosamente, "Rogelio"...

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